SEGURIDAD ALIMENTARIA EN NUESTRO MENÚ NAVIDEÑO III: LAS SOBRAS

 

¡FELIZ AÑO GENTE!

¿Cómo se están dando las fiestas? ¿Cuántos kilillos de más llevamos encima? 😉 . Bueno, pues hoy os traemos la última entrega de los “especiales navideños”. ¿Qué se hace después de comprar, cocina y comer?????? Pues sí: guardar los sobrantes para abastecernos durante una temporadilla. Porque sabemos que, aunque en la primera entrega (podéis verla aquí: http://blog.apthisa.com/seguridad-alimentaria-en-nuestro-menu-navideno-i-la-compra/) os advertimos de que no comprarais en exceso, no lo habéis (hemos) cumplido…

Así que ahí van nuestros consejitos para almacenar correctamente y sin riesgo las sobras de comidas preparadas en Navidad:

-Primeramente, antes de proceder a almacenar los alimentos, estos debe trasvasarse a recipientes de fácil limpieza y desinfección provistos de tapa hermética. Lo ideal son tapers de cristal que posteriormente podremos calentar sin riesgo en horno o microondas. Si utilizáis recipientes de plástico, comprobar que estos sean de uso alimentario (simbolito de copita y tenedor en el fondo del recipiente) y que puedan utilizarse en el microondas si así tenéis previsto.

-Todas las comidas elaborados precisan almacenarse en frío: bien sea en refrigeración, bien sea en congelación ¡¡¡¡PROBIDO ALMACENAMIENTO DE OLLAS, CACEROLAS, BANDEJAS…ETC. CON RESTOS DE COMIDA A TEMPERATURA AMBIENTE!!!!!! Recordad que los microorganismos patógenos en los alimentos, tienen una temperatura ideal de crecimiento entre 20-40ºC…Antes de almacenar cualquier tipo de alimento nos aseguraremos que este no está muy caliente (ha dejado de humear) para evitar subidas de temperatura del equipo de frío y por tanto de otros alimentos almacenados en el.

-Si sabemos que los sobrantes se van a consumir en las primeras 48 horas tras su elaboración podemos almacenarlos refrigerados (entre 0-4ºC). Tener en cuenta a la hora de almacenar en la nevera, que aunque dispongamos de un frigorífico en condiciones, muchas veces lo sobrecargamos con lo cual, no garantizamos temperaturas correctas de conservación.

-Si por el contrario, no vamos a consumir las sobras en los dos días siguientes (comer pavo relleno tres días seguidos como que no….) pues mejor congelarlas en ese mismo momento. A la hora de congelar tendremos en cuenta la potencia de nuestro congelador. En general los congeladores domésticos se clasifican por estrellas. Cada estrella supone -6ºC de temperatura, así que, como la temperatura de congelación idónea debe ser de al menos -18ºC, nuestro equipo debe disponer al menos de 3 estrellitas.  Si disponemos de diferentes comidas, congeladas en diferentes fechas, lo ideal es etiquetar los distintos recipientes con el nombre del alimento y la fecha de congelación, para posteriormente a la hora de descongelar, hacerlo primero en alimentos previamente congelados. Recordad que los alimentos en el congelador no sobreviven infinitamente…Existen tablas, como esta de la FDA (Food and Drugs Administration) donde se establecen tiempos recomendables para la duración de alimentos en congelación: http://www.fda.gov/downloads/Food/ResourcesForYou/HealthEducators/UCM148133.pdf

 

-A la hora de descongelar, lo haremos siempre en refrigeración, nunca a temperatura ambiente. En el caso de materias primas crudas como carnes y pescados lo haremos en un recipiente provisto de rejilla que permita separar el alimento del líquido exudado. Si no disponemos de rejilla, periódicamente vaciaremos el líquido del recipiente evitando en medida de lo posible el contacto con el alimento (este exudado actúa como caldo de cultivo de microorganismos).

-Cuando recalentemos los platos que así lo necesiten, lo haremos concienzudamente. Muchas veces, por las prisas, las ansias…etc. tan solo calentamos el alimento en superficies, dejando el interior frío. Como ya os hemos dicho en anteriores ocasiones, los microorganismos de los alimentos se destruyen única y exclusivamente con tratamiento térmico, por lo que debemos garantizar 65ºC en todos los puntos de nuestro producto durante al menos 3 minutos. Así que cucharita en mano y a remover  a ritmo de aquella canción que decía “bate que bateeeeee…..”.

 

Y esto es toooodo….¡FIN DE FIESTAS! L .Pero seguro que en febrero aun cae algún restito de alguna comida de Navidad si la habéis almacenado siguiendo nuestros consejos.

 

Cualquier consulta o pregunta no dudéis en contactarnos. De igual forma, no dudéis en sugerirnos algún tema para entrada del blog…

Recordad que “Juntos alimentamos la seguridad”.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Un comentario sobre “SEGURIDAD ALIMENTARIA EN NUESTRO MENÚ NAVIDEÑO III: LAS SOBRAS